Una familia con un hijo adolescente ciego y en una silla de ruedas y con una capacidad de manipular a los demás de manera sobresaliente, reciben en un momento de su vida la entrega de una niña por parte de un padre que no puede mantenerla, SÓLO ve a su hermanastra como los ojos y los pies de sus necesidades, entre ellos se crea una dependencia absoluta por parte de ambos, la obediencia de FELICIA (su hermanastra) hacia SÓLO es absoluta, se percibe por momentos una relación sexual casi obligada, al mismo tiempo la necesidad patológica de necesitarse el uno sobre el otro, convierte esta relación en una mina de segundas intenciones, todo esto sazonado con unos padres que después de haber tenido un accidente en globo, ambos pierden las piernas y se ven obligado por SÓLO a vivir en condiciones pésimas, la falta de recursos económicos de esta familia que en su tiempo fue acomodada y ahora en la más absoluta indigencia, le da un carácter a la obra decadente y trasnochador.
Hasta que un día y después de repetir siempre las mismas escenas, los mismos chistes, las mismas conversaciones, hacen que FELICIA (el hermanastro) tome una determinación que cambiara la vida de todos.
Si trabajamos que SÓLO es padrastro de FELICIA la relación seria la misma, SÓLO que el texto cambiaría que en vez de llamar el uno al otro como padre e hijo, se llamarían hermano.
